Daniel Scioli visitó hoy Catamarca y quedó envuelto en la interna oficialista entre la gobernadora Lucía Corpacci y el vice Dalmacio Mera, con intenciones de sucederla.

Scioli arribó en avión a la capital de la provincia junto a Mera y cuando Corpacci lo supo estalló de celos. Lo esperaba para una visita a la Catedral “Nuestra Señora del Valle”, donde visitó a la Virgen en el cuarto día de las festividades en honor a la madre morena, que concluyen el domingo con una procesión.

La elección en Catamarca será simultánea a las nacionales en octubre, pero hasta ahora no convocaron a primarias por lo que es un misterio cómo se definirán los candidatos del oficialismo. Mera quiere jugar y Corpacci no declina su sueño de reelección.

El gobernador llegó acompañado además del secretario de Derechos Humanos, Guido Carlotto; el senador Alberto de Fazio, uno de los armadores de su campaña y el ministro de gobierno catamarqueño, Gustavo Saadi.

Scioli, siempre conciliador, buscó acercar posiciones también con la gobernadora. Dijo que “el Frente para la Victoria es, como se expresó en Salta, la victoria de los que más la necesitan, es una foto a favor. Nunca vi que las cosas en contra salgan bien”.

En primer lugar se trasladó a la Casa de Gobierno, desde donde se dirigió caminando hasta la Catedral Basílica de Nuestra Señora del Valle. Tras la celebración, Scioli encabezó una conferencia de prensa junto a Corpacci en la Casa de Gobierno, en la que instó a los ciudadanos a sumarse al voto "a favor del trabajo argentino, la industria nacional, las políticas sociales, soberanía energética, independencia económica, como una victoria de los humildes y trabajadores".

"Como integrante y compañero de un equipo que conduce la Presidente de la Nación (Cristina Kirchner), afirmo que somos el espacio político que más viene haciendo por los humildes, los trabajadores, por desendeudar al país, por haber recuperado el rol activo del Estado en materia de recursos humanos y redistribución del ingreso", agregó Scioli.

Corpacci por su parte se guardó su fastidio y expresó públicamente su respaldo a la candidatura presidencial de Scioli.